Es del conocimiento de quienes trabajan en el área agropecuaria, que muchos de los agentes causantes de enfermedades que atacan a los animales y al ser humano, pueden ser transportados a través de los vehículos, conductores, equipos u otros animales que entren en las distintas Unidades de Producción, motivo que obliga a los propietarios de dichas fincas a tomar las medidas de seguridad necesarias para evitarlo, estando aquí el término de bioseguridad como la mejor alternativa.
Los médicos veterinarios, agrónomos y técnicos agropecuarios que laboran en PIDEL visitan Unidades de Producción todos los días para aplicar y transferir tecnologías que le permitan a estos productores ser más eficientes en sus labores, toda esta rutina de trabajo convierte a los técnicos de campo y sus vehículos en potenciales transporte de los agentes causantes de enfermedades a las distintas fincas que visitan, razón por la cual la Fundación NADBIO ha implementado normas de bioseguridad para ser llevadas a cabo por su personal técnico cada vez que visita una Unidad de Producción. Estas normas consisten en aplicar productos desinfectantes a los vehículos e indumentarias de trabajo de los técnicos de campo cada vez que entran y salen de una Unidad de Producción, garantizando de este modo no ser ellos los vectores de ciertas enfermedades.